Me juego lo que quérais a que no se le dedica ni una cuarta parte del tiempo a los abucheos dedicados a SS.MM. en el basket que a la ya famosa peineta de Aznar.
Ni los medios de comunicación, que tienen para recrearse con el video del comienzo del partido y el hinno nacional, frente a una única foto, del dedo enhiesto del ex-presidente.
Ni los miembros del gobierno, que han hecho cuestión de estado lo que el dedo de Aznar significa frente a los cuatro redicales pesadisimos de siempre. frente a lo que de verdad debería hacerles reflexionar acerca de a que coño va el Rey a Bilbao.
Ni los miembros de la oposición, que están para no meterse en jardines y por supuesto, no salir en defensa del que fue presidente de su partido y al que muchos , empezando por Rajoy, claro, le deben su puesto.
Ni al opinión pública en particular, que como se alimenta de los medios de comunicación y que alimentan a partes iguales el gobierno y la oposición, pues tendrán sobredosis de dedo y déficit de pitada.
Y una vez más. Así nos va.
5 comentarios:
El gesto de Aznar a los universitarios (con la inercia iba a menospreciarles llamándoles "estudiantes") que le insultaron a la entrada y la salida de su conferencia en la Universidad de Oviedo ha sido muy oportuno, aunque personalmente prefiero el corte de mangas, más racial, como más español, sobre todo si la acción culmina con la reverberación forzada del antebrazo a causa de la violencia del golpe en la cara anterior de la articulación.
Esa veintena de universitarios de extrema izquierda, valga la redundancia, demuestra que, casi una década después, el odio hacia Aznar inculcado por sus mayores en los partidos políticos y los medios de comunicación ya sólo sirve para organizarle algaradas de lo más deslucido. A pesar de que el grupo PRISA dedicara una página a glosar la hazaña de estos revoltosos, lo cierto es que el resultado ha sido más bien patético, aunque sus profesores, probablemente del área de humanidades, recompensen la actitud de estos jóvenes concienciados por un mundo más justo con un espléndido sobresaliente, en atención a sus méritos en defensa de la libertad y la democracia. El único efecto conocido, además del académico, es que la vicepresidenta del Gobierno, apartada por ZP de la comisión de inútiles contra la crisis, ha encontrado un nuevo motivo para insultar a Aznar exaltando a estos defensores del pluralismo universitario, y con ello justificar el sueldazo que le pagamos todos los españoles.
Se trata de jóvenes sobre los que se cierne un futuro laboral nefasto a causa de la labor destructiva de la izquierda cuando llega al poder en cualquier país civilizado, pero como el universitario medio actual no incluye entre sus planes el trabajar algún día en cualquier labor que lleve aparejado un salario, jamás les veremos protestar contra los que están haciendo que su vida sea un desastre improductivo sin solución. Lo suyo es la rebelión permanente, el eterno radicalismo y la marginalidad constante, de forma que llegarán a los cincuenta haciendo lo mismo que ahora, protestar, convencidos de que la sociedad tiene una deuda con ellos que se niega a satisfacer.
Llaman a Aznar asesino por una guerra en la que no participó ni un solo soldado español, mientras que Zapatero, que acumula varias decenas de bajas de militares en el mismo escenario, sigue siendo considerado como una especie de Kerensky al que conviene cuidar porque es el único marxista capaz de ganar unas elecciones en España. Mas no pondremos en un difícil aprieto a la universidad pública española exigiéndole coherencia. El Alma Mater es un microcosmos alternativo, donde todo radicalismo es bendecido y exaltado por unas estructuras académicas cada vez más alejadas de la realidad.
Por eso es conveniente que de vez en cuando los invitados les muestren a estos revolucionarios de chichinabo el dedo corazón, en representación de todos los que pagamos su forma de vida hasta que, bien entrada la treintena, deciden incorporarse a un partido político, sindicato u ONG. Y si los padres de las criaturas les suprimieran durante dos semanas la asignación económica que utilizan para expandir la conciencia en los aparcamientos de las discotecas del extrarradio mucho mejor.
Un ex-presidente, aparte de permitirse dar lecciones de cómo salvar un país, quizás debiera aprender a dar clases de buena educación.
Un ex-presidente, aparte de permitirse dar lecciones de cómo salvar un país, quizás debiera aprender a dar clases de buena educación.
eso es lo que falta, buena educacion; pero no precisamente a aznar.
A mi lo que más me gusta de la foto (además de la peineta) es la cara que pone Aznar. No es un gesto tenso, es un gesto de satisfacción. A mi personalmente este tipo me cae bien, y aunque como todos cometió algún fallo, eso era lo raro. Otra cosa es ZP, que lo raro es que acierte alguna.
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